Mochilazo vs turismo tradicional
He ahí una interrogante que algunos futuros viajeros se plantean antes de salir de casa: ¿mochilazo o tradicional? Así que te presentamos algunas variables para tomar en cuenta al momento de poner en la balanza ambas opciones.
Como “mochilazo” entendemos un viaje independiente enfocado en viajar más con menos (en ambos sentidos: menos recursos, menos equipaje), sacrificando para tal efecto algunos elementos del viaje tradicional. De tal forma, en este artículo entendemos como “viaje tradicional” aquel que por sus características y presupuesto consume casi exclusivamente los mejores servicios turísticos del destino que se puedan pagar (como hoteles de 4 o 5 estrellas, tours, antros, restaurantes o paquetes).
Las variables para considerar son: economía, cultura, sociabilidad, comodidad y tiempo. Así pues, empecemos a desglosar nuestro tema y a ver de a como nos toca.
Economía
Existe un mito que da por sentado que el viajar de mochilazo es por efecto lógico más económico que el viaje tradicional. Bien, si la planeación es adecuada y los objetivos son precisos, el mochilazo puede acarrear ciertas ventajas financieras. Por ejemplo, el hospedaje es significativamente más económico, considerando que solo tendrás que preocuparte por un lugar para pasar las noches y descansar. Existen hostales que van desde los 100 pesos hasta los 600 pesos por noche (tomando en cuenta que estas pagando por una cama), aunque, existen otras alternativas de hospedaje como las presentadas por couchsurfing.com donde puedes ponerte de acuerdo con algunas personas y obtener hospedaje gratuito por unas noches. Incluso el pasar las noches en aeropuertos o viajando reducen significativamente los gastos. Sin embargo, en caso de no planear adecuadamente tu mochilazo, puedes llevarte algunos inconvenientes monetarios que podrían hacerte odiar la experiencia. Por ejemplo, hay que considerar el peso de tu backpack pues te puede generar cargos extras por sobrepeso en líneas aéreas y autobuses, además si te llega la noche repentinamente y no tienes dónde quedarte, puedes arriesgarte a pagar un hotel que se salga de tu presupuesto.
El otro punto a considerar es el elevado costo de los lockers y guardaequipajes que probablemente llegarás a utilizarlos si no tienes un lugar a donde llegar. El último punto son los gastos impulsivos que debes evitar, ya que una de las premisas del mochilazo es conocer más con menos, así que deberás poner en la balanza si prefieres conocer el mejor antro de la ciudad o conocer los alrededores.
Otro punto a considerar en el aspecto económico es la comida, pues es necesario alimentarse adecuadamente para aguantar esas largas jornadas. Aunque también es lógico probar algunos de los platillos tradicionales del lugar, pero algunos de estos platillos pueden ser muy costosos, así que debes procurar probarlos y seguir con tu dieta de comida económica en mercados o supermercados (si te encuentras en un pueblito, puedes ayudar a la economía de alguna familia y disfrutar de su comida casera).
Por último, el desplazamiento entre pueblos y ciudades, además del desplazamiento interno debe hacerse a través de los medios urbanos adecuados (nunca taxis). También es importante quitarse la pena, recordando que hacer amistades nos ahorra uno que otro pasaje a través del tradicional y socorrido raid.
Si consideramos esas variables entonces el mochilazo resulta por mucho, más económico que el viaje tradicional donde pagas prácticamente por lo más costoso del lugar visitado (hoteles, taxis, restaurantes, tours, etc.), aunque se ve disminuida tu comodidad.
Cultura
Todo viaje es cultura (aunque sea uno trivial), pero el turismo tradicional representándolo como un paquete de 4 días y 3 noches, tiene características de disfrute cultural muy distintas a las del mochilazo.
La principal ventaja radica en los tours pagados que te dan la oportunidad de conocer en tu idioma los detalles y la historia de la ciudad receptora. Además se tiene la posibilidad de disfrutar los mejores platillos y hacer compras particulares o sourvenirs que te permitirán rememorar tu viaje, pero posiblemente no te interese eso y tan solo quieras estar encerrado en tu resort descansando de todo.
En el mochilazo se tiene la oportunidad de disfrutar las expresiones culturales en pleno esplendor y desarrollo, además del disfrute antropológico de la vida cotidiana en los lugares visitados. Los mercados, las romerías, los eventos religiosos, el desarrollo artesanal y los movimientos culturales del ambiente local. Sin embargo, es recomendable tener un apartado monetario que permita realizar visitas imperdibles a museos, alrededores, shows y diversas manifestaciones artísticas (antiguas y modernas) que no pueden posponerse. Por lo tanto, la cultura también requiere de sacrificios económicos en ambos tipos de turismo.
Socialización
La parte social en el tema turístico es fundamental, pero va a depender de tu forma de viaje y tus expectativas, porque es diferente viajar en pareja o en familia que viajar solo, con un cuate o amiga.
En primer término, el viaje tradicional generalmente lo hacemos en familia, pareja o amigos, por lo tanto las oportunidades de socializar con la comunidad local se reducen, aunque no se eliminan. Siempre será posible establecer alguna conversación con los guías de turistas, los artesanos, o el personal del hotel y los restaurantes que visitamos.
En el caso de ir con un grupo de amigos, la posibilidad de antrear o conocer otros(as) turistas en el hotel o el bar siempre estará latente.
Ahora bien, en el mochilazo, el fenómeno de la socialización es un tema primordial, sobre todo a nivel antropológico. Debemos considerar incluso que eso es parte del objetivo; convivir con las personas de la comunidad, conocer sus costumbres, hábitos y cotidianeidad, ¿para qué?, para enriquecer la experiencia humana del viaje.
Además, gracias a esos contactos podemos obtener recomendaciones y tips de diversa índole, por ejemplo: ¿qué comer y dónde de manera económica?, ¿qué lugares visitar? o simplemente, ¿cómo desplazarse de forma económica?
La relación que se genera entre el viajero independiente y la localidad, reaviva y alimenta los intercambios culturales entre los pueblos, porque utiliza al andarín como vocero de la forma cultural visitada. Los viajeros hablan del lugar en otras partes del mundo y a la vez el andarín habla de su lugar de procedencia. Un ir y venir cultural.
Comodidad
Tal vez el mochilazo represente de inmediato una significativa pérdida de comodidad en el viaje, pero como hemos analizado esto es en pro de otras ventajas de la práctica. Sin embargo, el mochilazo no tiene por que ser un martirio si se planean las cosas de la manera adecuada. En este sentido es importante siempre tener una reservación del lugar al que planeas llegar, averiguar previamente los lugares de interés y todo lo necesario para evitar la incertidumbre del viaje.
Los hostales, hoy por hoy, ya son prácticamente hotelitos de bajo costo con todos los servicios necesarios para recobrar energía y seguir viajando. La opción de llegar con una familia de couchsurfing genera también muchísimas ventajas en la comodidad, pues podemos usar sus servicios sin necesidad de desembolsar muchos recursos. Por supuesto en este tema, el turismo tradicional gana la batalla debido a la cantidad de dinero destinada a esa experiencia, en los hoteles de cuatro o cinco estrellas práctica-mente pagamos por la comodidad, el lujo y el servicio.
Tiempo
Tanto un buen mochilazo como un buen viaje por paquete requieren el tiempo necesario para su completo disfrute, pero en el turismo tradicional el tiempo parece medido debido a que realizamos este tipo de viaje durante un periodo de vacaciones para escaparnos de la cotidianeidad del trabajo (o estudios), de la ciudad o simplemente de nuestro entorno, así que en promedio puedes pasarte hasta siete días disfrutándolo. El mochilazo lo realizamos preferentemente dejando la agenda a un lado, sobre todo si llevas un largo tiempo planeándolo, además ése es parte de su encanto; viajar lo más que se pueda sin preocuparnos de regresar pronto a nuestro hogar.
En conclusión
Dependiendo de tus objetivos y comparándolos con las variables que te hemos presentado podemos asegurarte que si planeas adecuadamente tu viaje, ya sea tradicional o de mochilazo tendrás una excelente experiencia.
Por lo tanto, no es que uno sea mejor que otro, tan solo tienen diferentes significados para la experiencia que llevarás a cabo. Si lo tuyo es el antrear, los buenos restaurantes, la comodidad, el descanso y no te interesa tanto la cultura del lugar que visitas, entonces lo tuyo es el turismo tradicional. Sin embargo si te sientes atraído por conocer la diversidad de expresiones culturales y viajar lo más que se pueda con un presupuesto limitado, tu respuesta podría ser el mochilazo. De cualquier forma recalcamos que todo viaje es cultura y cultura es experiencia, esto siempre valdrá la pena.
Especialista en turismo, capacitador, docente, travel-coolhunter e investigador turístico. Director de la revista Mochilazo Cultural.
