Voladores de Papantla

México es sin duda un país interesante y lo es por sus características naturales, pero principalmente por su gente. Nuestros dioses son capaces de bajar literalmente del cielo como en el caso de Kukulkán y si no bajan nuestra gente es capaz de elevarse a las alturas como el caso de los voladores de Papantla.

Desafortunadamente la historia de sus orígenes es un tanto incierta y ni los mismos antropólogos se ponen de acuerdo acerca de su inicio. Aunque para eso la tradición oral de los pueblos se encarga de repetirla y tenerla presente.
La mitología totonaca cuenta que durante una época sin lluvias y de hambruna en la región, cinco pobladores decidieron enviarle un mensaje al dios de la fertilidad Xipe Totec, así que se dirigieron al bosque y buscaron el árbol más alto y pasaron la noche junto a él bendiciéndolo. Al día siguiente lo cortaron y se lo llevaron a su poblado sin que tocara la tierra hasta el lugar exacto donde efectuarían su ritual. Pelaron el árbol y se vistieron de plumas simulando pájaros a los ojos de Xipe Totec, se amarraron cuerdas a su cintura y realizaron el primer ritual al sonido de la flauta y los tambores.
El caporal es la persona que baila y toca la flauta hasta lo alto del palo y dirige el ritual donde deben bajar cuatro voladores representando los cuatro puntos cardinales de la tierra, cada uno de ellos debe dar 13 vueltas representando los trece cielos del dios Sol. El ritual termina hasta que el último volador toca el suelo.
La danza de los voladores en el palo, es técnicamente la etapa final de un largo ritual solemne también conocido como “vuelo de los muertos” que inicia con la búsqueda del árbol adecuado y he aquí sus elementos.
El palo volador. Aunque hoy ya no es necesariamente un palo de árbol, originalmente debía buscarse entre el bosque y no debía tocar el suelo hasta el hoyo donde se enterraría. Los hombres de la comunidad ayudaban a sostenerlo (existen de diferentes alturas).
El caporal. Es quien dirige el ritual, toca el tambor y la flauta mientras danza en lo alto y también ordena cada uno de los movimientos y acrobacias que cada danzante debe realizar.
Los danzantes voladores. Son cuatro y descenderán dando 13 vueltas amarrados de la cintura. Algunos mostrarán diferentes maniobras mientras descienden.
La flauta. El caporal realiza sus propios instrumentos con materiales de la región. La flauta es de tres orificios y con ella se deben entonar Los sones del volador como se le denomina a la música del ritual.
La vestimentaEn la actualidad consiste en camisa blanca, pantalón rojo brillante, botas o huaraches, un pañuelo y un tocado floreado del que se desprenden listones de colores y que representan aves de la región, aunque en el caso de la danza Hua-hua, el tocado o gorro es de mayor tamaño ya que representa el arcoíris.

Ángel Abraham Chávez

Especialista en turismo, capacitador, docente, travel-coolhunter e investigador turístico. Director de la revista Mochilazo Cultural.

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